La sequedad es uno de los principales problemas que puede deteriorar el estado de la piel, siendo responsable de numerosas anomalías como arrugas, aspereza, granos. Un cutis seco puede acelerar el envejecimiento de la piel.
Síntomas: Piel reseca. Escamas en la piel. Piel con poros abiertos. Granos en la piel. Acné. Piel áspera. Piel con grietas. Estrías en la piel. Piel irritada. Piel arrugada. Exfoliaciones. Etc.
Causas: Envejecimiento. Excesiva sequedad ambiental. Factores hereditarios. Resultados de alguna enfermedad. Factores químicos. Alimentación.
REMEDIOS PARA LA PIEL SECA
Fitoterapia: Usaremos plantas humectantes (que proporcionan o ayudan a conservar la humedad adecuada de la piel), plantas antiinflamatorias (para reducir la irritación de la piel), y plantas nutritivas (que proporcionan aquellos nutrientes adecuados para la salud de la piel). Aguacate. Caléndula.
Aceites y pulpa de frutas: Aceite de argán. Aceite de maíz. Uva. Melocotón. Melón.
Alimentos ricos en omega-3: Aguacate, nueces, semillas de calabaza, semillas de girasol, almendras, avellanas, nueces de Brasil, pistachos, sésamo (sin freír y sin sal). Semillas de chia, semillas de lino… Pescado azul.
Alimentos antioxidantes ricos en vitamina C.: Pimientos. Kiwis. Escaramujo. Brócoli. Rúcula. Cítricos.
Alimentos ricos en betacarotenos: Frutas y verduras de color naranja (zanahorias, calabazas, mangos, melocotones, nectarinas, nísperos, papaya, caquis, albaricoques…). Vegetales de hoja verde (espinacas, brócoli, borrajas, acelgas…).
Vitaminas y minerales necesarios para la piel: Zinc. Vitamina del grupo B. Vitamina C. Vitamina E.